domingo, 31 de agosto de 2014

LOS GOLPES QUE MÁS DUELEN. Para Gabriel Ruiz y María Isabel Casas, para NTC… . Por: Alejandro José López . Agosto 31, 2014

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En su 2a. etapa, provisional,
publican y difunden 
NTC … Nos Topamos Con 
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LOS GOLPES QUE MÁS DUELEN

Para Gabriel Ruiz y María Isabel Casas, para NTC…

Por: Alejandro José López ( 1 )
Leí la noticia y encajé en mi espíritu, contundentemente, el knock-out. Quise pensar en la naturaleza del golpe o saber exactamente dónde me dolía, pero los zumbidos del malestar me lo impidieron. Ante los ramalazos que aporrean el alma, mucha gente suele identificar las cosas con precisión; y por eso uno los oye decir que les duele el corazón, o el hígado, o el estómago. Yo nunca he podido: a mí me duele todo.
En este caso, me duele el debate (¿queda en la cabeza?), aprendizaje tan necesario para esta nación acostumbrada a dar por hecho que “detractor” es lo mismo que “enemigo” ―¡y vaya si nos ha costado muertos esta terrible confusión!―. Y me duele la difusión cultural (¿queda en la lengua?), en este país donde sólo suelen promocionarse las producciones artísticas cobijadas por bendiciones o mecenazgos políticos ―¡vaya servicio más flaco a la autonomía del campo estético!―. Y me duele la amplitud de criterio (¿queda en los ojos, o acaso en los oídos?), en esta patria sempiternamente polarizada y fanática en la cual sólo quienes piensan de idéntica manera se apoyan entre sí ―¡y vaya menú el que se le ofrece a los otros: “ninguneo a la parrilla”!―. Y me duele el ejercicio de la solidaridad (¿queda en el pecho, o en los pies?), en este entorno nuestro acostumbrado a mirar para otro lado cuando alguien cae en desgracia ―¡y vaya si se agradece el apoyo cuando la mala suerte se ensaña con uno!―. Y me duele la amistad (¿queda en el corazón, o en los brazos?), ese milagro del afecto que se produce cuando dos espíritus se acompasan y multiplican las formas de comunicarse más allá de las palabras ―¡y vaya si escasean en nuestro ámbito cultural todos los prodigios ligados al cariño!―. Por eso digo que cuando leí la noticia de que NTC… se iba a acabar, a mí me dolió absolutamente todo.
Sé que cada persona reacciona de manera distinta frente al dolor. Conozco gente que, al recibir un golpe, se ríe con carcajadas nerviosas. Hay quienes, ante cualquier dolencia, se paralizan. La mayoría simplemente llora. A mí el dolor me da con rabia; algunas veces orientada, otras in abstracto. De tal manera que paso horas o días lo que me dure el malestar― despotricando, refunfuñando, protestando. Esta vez, con lo de NTC…, mis rezongos llevan ya varias semanas. Y como no cesa mi desazón, he decidido esforzarme por reconducir mis reacciones habituales. Creo que es un acto de esencial justicia. Aquí no hay contra quién enojarse; pero en cambio sí hay a quiénes agradecer y, la verdad, hay muchísimo qué agradecerles. Mi gratitud es enorme con Gabriel Ruiz y con María Isabel Casas, tanto en mi rol de lector como en el de escritor. En primer lugar, han sido catorce años de trabajo ininterrumpido ―casi diario― de arduo trabajo en pro de la cultura colombiana, años en los cuales hemos dispuesto sus lectores de información actualizada, permanente y pródiga sobre el acontecer cultural del país. De hecho, los seguidores de NTC… quisiéramos que alguna vez Gabriel y María Isabel ―responsables únicos de esta admirable empresa― nos revelen cómo hicieron para conseguir el misterioso don de la ubicuidad. Como escritor les agradezco su compañía y respaldo durante todos estos años, les agradezco la generosidad con que han acogido mi trabajo literario; pero, ante todo, les agradezco el maravilloso regalo de su amistad.

La desaparición de NTC… es un golpe seco y recio en el mentón de la cultura colombina, uno de esos golpes que duelen, que noquean. Se comprende, por supuesto, que sus creadores acusen cansancio luego de tantos años de trabajo realizado con visión, con dedicación, con imaginación y sin remuneración. Y más aún cuando la salud de Gabriel no anda en su mejor momento. Con todo, conservo a la esperanza de que el más importante medio alternativo que tiene el periodismo cultural colombiano halle la forma de proseguir. Sería casi un milagro, ya lo sé; pero me aferro a esta posibilidad para que no me gane la desazón suprema.
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Cali, agosto 31 / 2014
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( 1 ) http://ntc-narrativa.blogspot.com/2012_08_24_archive.html

http://literaturaenelvalle.blogspot.com/2011_07_20_archive.html
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NOTA AFECTUOSA y de AGRADECIMIENTO de G. Ruiz, M. I. Casas y NTC ...


Cuán agradecidos y fortalecidos nos sentimos con nuestro apreciado y admirado amigo,  escritor y gran NTC ...-colaborador Alejandro José por su generoso texto y por sus sentidos y significativos rezongos y reflexiones, todo, sin duda, fundamentado en

... el maravilloso regalo de su amistad ... 
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Alejandro José López y Gabriel Ruiz (de NTC ...) 
En el lanzamiento del libro ALCÁNTARA de Pedro Alcántara Herrán
 Cali, Diciembre 12, 2013. Hotel Spiwak-Chipichape
http://ntc-pintura.blogspot.com/2013/12/alcantara-y-su-libro-alcantara.html
https://picasaweb.google.com/111515077843964359836/ALCANTARALanzamientoDelLibroCaliDic123013#
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Alejandro José López y Gabriel Ruiz (de NTC ...) 

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viernes, 29 de agosto de 2014

Colombia pegujal donde no pelechan los medios alternativos. Por Efer Arocha. París, 22 de agosto de 2014

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NTC … Nos Topamos Con 
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De: Efer Arocha 
Fecha: París, 22 de agosto de 2014, 8:36


Asunto: Noticia inesperada
Para: NTC ntcgra@gmail.com 


Gabriel y María Isabel:

Acabo de llegar del campo y mirando todo mi correo, me encontré la lamentable información sobre tan bella utopía que ustedes dos crearon. De inmediato hice una pequeña nota de homenaje, en reconocimiento a su trabajo, en mi condición de lector, la  que les adjunto. Les agradecería se  la hicieran llegar a Jotamario. 

Soy partidario de que reconsideren su decisión y encuentren una solución que nos permita continuar recibiendo  sus despachos.

Un fuerte abrazo para los dos.


Efer
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Colombia pegujal donde no pelechan 
los medios alternativos

París, 22 de agosto de 2014

Por un artículo que apareció en el diario El País, de Cali, el 12 de agosto, escrito por Jotamario Arbeláez, me enteré que NTC … ( Nos Topamos Con ), el más importante órgano virtual alternativo especializado en la difusión  literaria existente en Colombia, en el cual se dan a conocer en lo fundamental todos los acontecimientos literarios de la nación, va a cesar su circulación. Su óbito lo ha venido tejiendo la fatiga y un agotamiento, al parecer paulatino, que es lo que intuyo, de esos dos grandes personajes del interés literario, Gabriel Ruiz Arbeláez y María Isabel Casas, quienes se fijaron como tarea servir al arte y a la cultura de la manera más  eficaz y sobre todo alejado de cualquier retribución palpable.
 Hace meses cuando estuve en Colombia ** tuve el grato placer de conocerlos, hecho que se encuentra entre los mejores recuerdos de mi viaje, por ser personas encantadoras en el trato personal, y particularmente en su conversación. Ya de cerca, sumido en la realidad escritural del Valle del Cauca, pude medir su labor encomiable en la difusión de las letras y los soñares de escritores y poetas, sean éstos, locales, nacionales, y algunas veces internacionales.
 La noticia me ha llenado de melancolía, en razón de  que es una pérdida para el hacer escritural, y en especial para el arte y la cultura de ese país, analizado en su conjunto creativo. La divulgación periodística de NTC, por ser especializada, portadora de un filón exquisito en el procesamiento de la noticia, donde se conjugan elementos gráficos, orales, textuales, y en ese orden se llenan múltiples exigencias, empezando por lo oportuno y lo investigativo, colocan al medio en el primer difusor del género en calidad, a escala nacional. De ahí de confirmarse la noticia, no hay duda que es una pérdida invaluable. Esa es la realidad “monda y lironda”; empezando porque en Colombia no sólo hay desinterés, sino desprecio a todas las manifestaciones del arte que no encajan en la sociedad de mercado, por una razón elemental y consabida, la ley implacable del beneficio económico campea por doquier.
En una sociedad regida por el concepto de utilidad económica, todo lo que no se ajuste a sus parámetros es desecho que debe ir al cesto. Este solo punto hace que la labor de Gabriel Ruiz Arbeláez y de María Isabel Casas, se enmarque en el plano de lo encomiable y muy particularmente por ser el fruto de lo personal y privado, donde lo oficial nunca ha tenido un gesto con ellos. En Colombia se ha carecido siempre de un programa permanente para ayudar, estimular o impulsar el arte; es por esto que NTC, para los medios oficiales sea inexistente. Los gobernantes no han tenido en cuenta la importancia del medio alternativo especializado en la formación de la conciencia cultural de la nación, y muy específicamente en la cimentación de elementos de calidad que elevan la comprensión y el nivel artístico y cultural del país. Lo dominante en lo alternativo en cuanto a sus fines, es el de ser portador real de las distintas manifestaciones del arte y la cultura en su realidad cotidiana. El gran valor del medio alternativo por ser una germinación espontánea, brotada de la necesidad y realidad social, es portador de valores directos que contienen  lo auténtico; es decir, lo genuino, en el sentido pleno del término, en razón de que no hay interés en sesgarlos o alterarlos, como sí  ocurre en los medios de otro carácter. La anterior esencia de lo alternativo hace que en distintos países, incluidos organismos  internacionales se les apoye sin ninguna condición para que sigan creciendo y robusteciéndose.
En el plano de lo privado en Colombia, es visible la desaparición acelerada de las realizaciones de significación que habían podido cuajar a través del tiempo. Cuando sal del territorio, los periódicos de alguna significación, tanto en lo local como en lo nacional, tenían gruesos suplementos literarios de excelente calidad, que circulaban los domingos, los que lectores no suscritos compraban ávidos, duplicando o triplicando el tiraje de fin de semana. Buena parte de la masa de lectores los coleccionaba, otros los empastaban convirtiéndolos en libros que deben reposar en alguna cuidadosa biblioteca personal. En la actualidad escasamente El Siglo de Bogotá conserva la tradición.
La inculpación y el lamento son una de las formas de existir de lo tanático, que tiene hondas raíces en las naciones latinoamericanas que no acostumbran a buscar la raíz de un fenómeno dado, sino que se conforman con ser espectadores pasivos de lo que les sucede. Mínimamente de manera comprimida, elucidaremos la causa fundamental de la agonía del arte y de la cultura, la que en su agonía afecta todo lo que tenga relación con ella; fenomenología que no solamente se presenta en Colombia sino a escala del planeta. El avance científico-técnico está permitiendo modelar de manera masiva las codificaciones intelectuales y los gustos de la población. Quienes tienen intereses en sacar ventaja de esta realidad en el plano material, y particularmente en lo económico, han programado crear un ciudadano que se acomode a sus objetivos, que no son otros distintos a convertirlos en una unidad cuyo fundamento de existencia sea el consumo y la carencia de una conciencia crítica. Para lograr el objetivo se busca modelar a un individuo altamente especializado en la producción, conocido en el lenguaje eufemístico bajo la denominación de profesional de alta calificación, cuyos dominios se centran en una minúscula área del saber, que le ha exigido consumir 25 años de su vida para alcanzar tan excelente resultado, sin poder dedicar un tiempo distinto a su formación humanística o intelectual.
Este tipo de personaje no se pregunta jamás el por qué se debe hacer; sino para qué me sirve ese hacer. Lo comprobé una y otra vez cuando fui profesor de Cultura y Civilización aquí en Europa. En los cursos sobre las tradiciones aborígenes o en Geografía, todos me hacían la misma pregunta ¿para qué me sirve eso profesor? Hablar del Paragüay o de la cultura maya o tolteca, de los países latinoamericanos o de su capitales, era como hablar del Mar de los Sargazos, cuya superficie de detritus es más grande que Europa. Pero los estudiantes colombianos no se quedan atrás, desconocen por completo los países africanos y sus capitales, saber dónde queda Togo y su capital Lomé; Chad – Yamena; Botsuana – Gaborone; o la cultura de los Wodaabes mejor conocida  como Bororos; o cuál es la cultura de los Tuaregs también llamados popularmente hombres azules, y para redondear, qué idioma se habla en la ciudad de Malabo, esto es como si les estuviera hablando del Mar de la Serenidad o el de las Tormentas, que están ubicados en la luna.
Lo anterior en el plano de lo elemental en el área del estudiante universitario; qué pensar de temas de verdadero calado intelectual como los que presenta la historia y el resto de las llamadas ciencias sociales, donde los jóvenes ignoran su existencia y ni siquiera se sienten aludidos, ni tienen curiosidad por saber de qué tratan la disciplinas mencionadas. Ahora sí como dice Jotamario “la cultura ha sido reemplazada por la farándula”, donde lo dominante es lo banal con su derivado, la superficialidad. Cualquier cosa que se quiera saber se va instantáneamente al Internet que lo sabe todo, sólo que su saber presenta lagunas; en algunos casos nulo y peligroso, en otros porque no es exacto con la exactitud que exige el rigor. Su punto fuerte es el de ser una gran biblioteca; pero como en todas las bibliotecas una parte de lo acumulado no se ciñe a la verdad o a la utilidad del saber. Con esto no quiero desconocer que ha hecho aportes incalculables e invaluables y es un instrumento útil para salir del paso. El Internet es el origen de la mutación social del conocimiento, porque ha sido su verdadera democratización y a la vez ha enterrado al que todo lo sabe, pero él no es la causa de la muerte del intelectual, por una simple razón, ¡no piensa!, como tampoco él no es la causa de las mutaciones sociales. El polígrafo que en toda la historia humana había tenido siempre su sitial de reconocimiento ganado mediante el dominio de la gnosis, como es el ejemplo bien conocido de Voltaire que se lo peleaban las Cortes europeas para que hiciera parte de los suyos, entró en declinación a mediados del siglo XX, y hoy es escasamente un fósil en sus últimos estertores que todavía deambula convertido en  anacronismo. El que el pensador sea ahora un individuo anacrónico es la consecuencia de la producción de bienes materiales que permiten emplear el ocio en otras direcciones distinto al placer que produce el saber por el sólo placer del conocer. Con Eduardo García, en un bar de la Plaza de Italia aquí en París en días pasados, él me contaba que estaba releyendo a Proust en el papel únicamente de sus personajes; en contrapartida le decía, que estoy dedicado a investigar el rol de las preferidas de los Reyes de Francia porque la favorita de una de esas tantas majestades tenía más poder que el soberano, y parece ser que una de estas beldades desde una “cave”, dirigió la guerra en la que Francia perdió el Canadá y la Nueva Orleans. De ser cierto, esto se convierte en un bocado del placer intelectual de la historia secreta de Francia. Es ese el placer que produce el conocer para deleitarse con la cantera que siempre ha existido entre el ejercicio del poder político formal y el poder real. Una crónica histórica de los malabares en los catres reales en busca del poder no horizontal, sino político, sólo puede ser interesante para medios como NTC, Con-Fabulación, Vericuetos u otros medios virtuales, que somos divulgadores de valores trascendentes del conocimiento real de la historia, hasta ahora cubierta de velos que la ocultan. Volviendo al hilo soy un optimista por principio, espero que los intelectuales del Valle constituyan un grupo que impida  el deceso de NTC, sea ayudando en las tareas o asumiendo todo el trabajo que hace Gabriel y María Isabel, para que no ocurra como sucedió con Cronopios que desapareció con su fundador y director Ignacio Ramírez Pinzón, amigo que vive en la memoria por la senda que van haciendo las palabras de tanto multiplicarse.

Desde París les envío a Gabriel y a María Isabel, un saludo y un abrazo cargado de reconocimiento y plenitudes, y a NTC una larga vida y memoria imperecedera.

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NOTA AFECTUOSA y de AGRADECIMIENTO de G. Ruiz, M. I. Casas y NTC ...

Cuán agradecidos y fortalecidos nos sentimos con nuestro apreciado y admirado amigo Efer por su generosas palabras y por sus significativas reflexiones. Un abrazo. 
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*Efer Arocha ,  http://ntc-narrativa.blogspot.com/2013_10_12_archive.html
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** Efer Arocha en Cali. Octubre 2013


Efer Arocha (der) y Gabriel Ruiz  . 
En Cali. Octubre 11, 2013. Centro Comercial Centenario  
http://ntc-narrativa.blogspot.com/2013_10_12_archive.html
Fotografías y grabaciones: María Isabel Casas R. , http://ntcblog.blogspot.com/2010_05_31_archive.html ,
de NTC … ,  Nos Topamos Con …  http://ntcblog.blogspot.com , ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia.
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jueves, 28 de agosto de 2014

Relatos desde el Bahareque. Mónica Liliana Flórez Arcila. 2000. PRÓLOGO. Los pasos de la memoria. Por Arturo Alape.

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En su 2a. etapa, provisional,
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NTC … Nos Topamos Con 
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Mónica Liliana Flórez Arcila 

2000



PRÓLOGO

Los pasos de la memoria 

Por  Arturo Alape



EL CONTENIDO TOTAL DE ESTA PÁGINA SE PUBLICÓ EN 
EL  BLOG DE ARTURO ALAPE, , ABIERTO Y MANEJADO  POR NTC ... DESDE EL 2006




PRÓLOGO

Los pasos de la memoria

Arturo Alape

La memoria humana tiene sus misterios que la hacen como imagen inatrapable, un rostro desdibujado. Rostro con las sutilezas de lo oculto en sus rasgos. Un mundo de sueños envolventes, traicioneros en sus itinerarios para despistar a sus buscadores. Los sueños son pesadillas, las apacibles pesadillas son sueños cotidianos. Un cuerpo de pasadizos con una eterna red y diversidad de puertas que suelen no tener llaves para abrirlas. La memoria tiene sus propios pasos, huellas que han significado quizá, la imagen de la alegría, quizá la imagen de la frustración. Las huellas de la memoria no siempre dejan en su transcurrir, señales de existencia, la memoria cuenta con sus propios vientos para ocultar y borrar las honduras de sus pasos. La memoria sufre su propia agonía como también su propia muerte. Depende del hombre dueño de aquella existencia. Un día el dueño de la memoria decide decretar el olvido de su propia memoria, porque el ser humano sobrevive porque fabrica el elixir de su desmemoria, para ocultar supuestos yerros humanos de niñez, juventud y adultez. La memoria también fabrica la mudez a su propia semejanza: no quiere abrir el baúl de sus secretos, decide, porque la memoria decide, irse con sus honduras hasta la sepultura. Al fin al cabo, la memoria es cuestión de seres humanos y los seres humanos en su devenir se vuelven seres complejos de vidas intensamente vividas. Es decir, cada hombre o mujer preserva como tesoro, la intimidad que en apariencia asoma como destello en cada mirada que expresa.

La memoria individual y colectiva lo abarca todo: sueños, experiencias, agonías incumplidas, oficios en sus diversas facetas, voces y entornos sociales ajenos, costumbres y hábitos, es decir, todo lo que construye el hombre en una vida de encuentros y desencuentros.

El trabajo de quien investiga la memoria individual y colectiva tiene sus bemoles, tiene sus complicaciones. Porque el investigador debe crear la estrategia adecuada para buscar y encontrar al dueño de la memoria que busca. No es cuestión de pagar un clasificado en la prensa y a esperar los resultados. No. Su estrategia está sujeta a desarrollar su propia metodología que le permita llegar, por lo menos a conocer de frente al interlocutor que busca. También en su estrategia el investigador debe por lo menos, conocer de antemano por información acumulada a la persona que desea investigar.

El investigador en su sutileza para preguntar preguntas inteligentes, debe llevar en su cabeza un arsenal de argumentos persuasivos para convencer al otro de la importancia de sus respuestas. Es decir, que el investigador debe estar sujeto al otro sujeto para iniciar con él una larga conversación, que permita en sus tiempos y en su transcurrir abrir las puertas de su memoria. Esto significa, que el investigador dejará de escucharse a sí mismo cuando hace sus trascendentales preguntas, y paciente aprenderá a escuchar al otro. Entre la acción de respeto por escuchar al otro, entre la acción que el otro hable, se construye lo que pudiéramos llamar una conversación adecuada con la memoria del otro. Entonces en el devenir contradictorio y amoroso de una larga conversación, surgirá como final un relato de vida que se ha construido entre dos, quien pregunta y quien responde. O a la inversa, quien preguntaba termina por responder y quien respondía termina por preguntar. El juego inteligente de las preguntas y de las respuestas. La memoria que se busca se ha reactivado. Ha encontrado quién la escuche, alguien que ha comprendido la importancia de que hable como historia.

Mónica Liliana Flórez descubrió en su trabajo Relatos desde el Bahareque, el hálito voraz e inteligente que tiene la memoria cuando habla. Y a través de la memoria, no importa la vejez de los años, no importa ciertas lagunas naturales de la memoria, ha descubierto el oficio de construir casas. Es decir, que su investigación regresa por los caminos de la fundación como hecho importante en la vida de los seres humanos. Regresa como historia, a la visión de constructores que trajeron los últimos colonizadores antioqueños cuando llegaron, a finales del siglo pasado a tierras del eje cafetero.
Eran hombres que necesitaban casas que se adecuaran a un entorno geográfico feraz, que se estaba abriendo hacia la naturaleza humana. Una arquitectura que leyera las necesidades de la tierra que se estaba descubriendo. Arquitectura que trabajara con materiales de la tierra del entorno geográfico mismo. Que se inventara en el terreno que se estaba adecuando para levantarse como acción de hombres que tenían actitudes de fundadores.

Mónica Liliana Flórez descubre el oficio de hacer casas sobre las montañas, laderas y abiertos en el eje cafetero. Escucha voces que hablan que la casa es espacio de intimidad en que se tejen sueños de familia; escucha voces que hablan que la casa debe tener espacios libres de libertad para deambular simplemente en compañía de los pensamientos; escucha voces de quienes tienen en la cabeza espacios de recogimiento en las horas de descanso en los finales de la tarde y comienzos de la noche; reconstruye voces que nos hablan amorosamente de los materiales que deben usarse, de las maderas que deben permanecer bajo abrigo del tiempo para luego servir adecuadamente para los fines propuestos; nos hablan de la duración de los materiales y la confluencia de la fuerza de duración que existe por naturaleza en éstos; nos hablan de la honradez profesional de los maestros que se hicieron maestros en el ajetreo de una experiencia laboral absolutamente bien ejercitada; nos hablan del amor como recuerdo de las obras finalmente terminadas. Los hombres que hablan relatan hechos de fundación de una arquitectura que sentó cimientos en una región, en los comienzos de una extirpe de fundadores.

El trabajo de Mónica Liliana Flórez hace parte del surgimiento de la necesaria recuperación de la memoria regional. Memoria que nos dará una visión de conjunto de lo que somos finalmente como país.
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Prólogo por Arturo Álape. En imágenes de las cuatro páginas del libro: 

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Agosto 28 de 2014
Ampliaciones y complementaciones de NTC …
BLOG abierto por NTC … , el 13 de AGOSTO de  2006, sobre Arturo Alape
con su aprobación, aportes y colaboraciones: 
 http://arturoalape.blogspot.com/
La última fotografía del Maestro Alape en CaliAgosto 9, 2.006
Biblioteca Departamental. Tertulia con jóvenes de Cali
alrededor de los 50 años de la explosión del 
7 de Agosto de 1.956
Nos Topamos Con …  http://ntcblog.blogspot.com ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia.
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REGISTRO del LIBRO en 

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*** "Relatos desde el Bahareque"Mónica Liliana Flórez Arcila. Universidad y Gobernación del Quindío, Marzo 2000.Prólogo por Arturo Álape (texto completo)
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Detalles sobre el libro y su autora: Acceder y navegar: http://ntc-narrativa.blogspot.com/2014_08_28_archive.html
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